
Gafas según la forma de la cara
hace 1 mes · Actualizado hace 1 segundo

Existen diferentes tipos de rostro, y cada uno se beneficia de determinados estilos de gafas que equilibran o realzan sus facciones
1. Rostro redondo
Características
- Caras redondas tienen mejillas llenas y una frente amplia. La barbilla también es redondeada.
- La cara es tanto larga como ancha, sin ángulos marcados.
Objetivo
- Queremos darle forma a la cara para que parezca más larga o elegante.
- Buscamos contraste con la redondez del rostro.
Recomendaciones
- Monturas angulares o cuadradas: Son buenas para contrarrestar la forma circular.
- Monturas rectangulares: Con aristas, ayudan a enmarcar y alargar la cara.
- Puentes claros o delgados: Un puente fino evita añadir volumen en la nariz.
- Gafas “cat-eye” (ojo de gato): Si son curvas hacia arriba, pueden ser elegantes. Pero evita las redondeadas.
Evita
- Monturas muy redondas u ovaladas, ya que realzan la redondez.
- Monturas pequeñas o muy anchas que hagan el rostro más ancho.
2. Rostro cuadrado
Características
- Caras cuadradas tienen una frente ancha y mandíbula marcada.
- La cara es tanto larga como ancha, con ángulos definidos, especialmente en la mandíbula.
Objetivo
- Queremos añadir curvas o suavizar los ángulos, sobre todo en la mandíbula.
- Queremos equilibrar la amplitud de la frente.
Recomendaciones
- Monturas redondeadas u ovaladas: Son buenas para suavizar los ángulos.
- Gafas de aviador: Equilibran la forma cuadrada con su base redondeada.
- Monturas tipo “mariposa” (con la parte superior más ancha): ayudan a equilibrar la mandíbula.
- Marcos finos o de grosor intermedio: Evita añadir volumen a una cara angular.
Evita
1. Rostro cuadrado
- Monturas muy angulosas o cuadradas, que acentúan la forma cuadrada del rostro.
- Gafas extremadamente pequeñas, pues exageran la estructura de la mandíbula.
3. Rostro ovalado
Características
- Se considera una forma “equilibrada”: la frente es ligeramente más ancha que la barbilla, y las mejillas se estrechan gradualmente hacia el mentón.
- Longitud mayor que la anchura.
Objetivo
- En general, el rostro ovalado se adapta a casi cualquier tipo de gafa.
- Resaltar la armonía natural del rostro sin romper su balance.
Recomendaciones
- Casi cualquier montura: redondeadas, cuadradas, rectangulares, “cat-eye”... El rostro ovalado es muy versátil.
- Experimentar con estilos llamativos o formas poco convencionales puede ser interesante, ya que la forma ovalada se presta a ello.
- Proporciones equilibradas: Aunque te beneficies de cualquier forma, asegúrate de que las gafas no sean ni demasiado grandes ni demasiado pequeñas en relación con tus facciones.
Evita
- Monturas demasiado anchas que sobrepasen en exceso los pómulos y desproporcionen la cara.
- Modelos extremadamente alargados verticalmente (por ejemplo, lentes muy grandes tipo “oversized”) que cubran demasiado el rostro y pierdan la armonía.
4. Rostro rectangular o alargado
Características
- Similar al rostro cuadrado, pero más alargado en la vertical.
- Frente alta y barbilla alargada, mandíbula un poco menos marcada que en el rostro cuadrado.
Objetivo
- Acortar visualmente la cara y generar la sensación de mayor equilibrio.
Recomendaciones
- Monturas profundas (altas): Cuanta más altura tengan las gafas, más ayudan a “acortar” visualmente el rostro.
- Formas redondeadas u ovaladas: Suavizan la longitud de la cara.
- Patillas o detalles laterales gruesos: Llaman la atención hacia los costados de la cara, generando la ilusión de rostro más ancho.
Evita
- Monturas muy angostas o estrechas que resalten la longitud de la cara.
- Gafas muy pequeñas, ya que agrandan aún más la apariencia alargada.
5. Rostro corazón (triangular invertido)
Características
- Frente amplia y mejillas a veces más prominentes, barbilla estrecha.
- La parte superior de la cara es más ancha y va afinándose hacia la mandíbula.
Objetivo
- Equilibrar la parte superior ancha con la zona más estrecha de la barbilla.
- Evitar que la frente parezca demasiado grande.
Recomendaciones
- Monturas que no sean muy anchas en la parte superior: Por ejemplo, gafas tipo “aviador” o “ojo de gato” que no sobrepasen demasiado las sienes.
- Monturas ligeras o con puente bajo: Esto ayuda a no sobrecargar la parte superior del rostro.
- Gafas con la parte inferior ligeramente más ancha: Equilibra la barbilla con la frente, dando la ilusión de mayor anchura en la zona inferior.
Evita
- Monturas excesivamente decoradas en la parte superior que hagan ver la frente aún más grande.
- Diseños muy geométricos o cuadrados que enfatizan la desigualdad entre frente y barbilla.
6. Rostro diamante
Características
- Pómulos marcados y anchos, frente y barbilla más estrechas.
- A menudo, la parte más ancha del rostro son los pómulos, con barbilla y nacimiento del cabello más finos.
Objetivo
- Equilibrar los pómulos con la frente y la mandíbula.
- Suavizar la anchura de la parte media del rostro.
Recomendaciones
- Monturas ovaladas o de formas suaves: equilibran los rasgos marcados de los pómulos.
- Monturas sin marco o de medio marco (semi al aire): reducen la atención en la parte central y remarcan más la mirada.
- Monturas con detalle en la parte superior: pueden ayudar a dar amplitud visual a la frente, equilibrando la anchura de los pómulos.
Evita
- Monturas muy angostas que se queden “pequeñas” en la zona de los pómulos.
- Diseños con la parte inferior muy cargada que hagan lucir la zona de los pómulos aún más ancha.
7. Rostro triangular (base ancha en la mandíbula)
Características
- Mandíbula ancha, barbilla amplia, frente más estrecha.
- La cara se ensancha hacia la parte inferior.
Objetivo
- Desviar la atención de la mandíbula, equilibrando con la frente que es más estrecha.
- Aportar volumen a la parte superior del rostro.
Recomendaciones
- Monturas tipo “cat-eye” o con la parte superior decorada: ayudan a equilibrar la parte baja más ancha.
- Monturas con puente llamativo: añaden interés en la zona central-superior del rostro.
- Formas ligeramente cuadradas o redondeadas en la parte superior: realzan la zona de los ojos, haciendo que la barbilla parezca más estrecha.
Evita
- Gafas con monturas muy anchas y pesadas en la parte inferior, pues añadirás todavía más volumen a la zona de la mandíbula.
- Patillas muy gruesas o pesadas que desplacen el foco hacia la parte baja de la cara.
Otros aspectos clave a considerar
- Tamaño y proporción:
- La montura debe estar en proporción con tu rostro. Si tu cara es pequeña, elige gafas más compactas; si tu cara es grande, unas gafas muy pequeñas podrían verse desproporcionadas.
- Color de la montura:
- Tono de piel y color de cabello pueden influir en la selección de color.
- Tonos cálidos (marrón, dorado, beiges) sientan bien a pieles cálidas; tonos fríos (plateado, negro, azul) pueden resaltar en pieles frías.
- Para una opción versátil, marcos neutros (negro, gris, tortuga, transparente) suelen ser fáciles de combinar.
- Puente:
- El puente puede cambiar la percepción del tamaño y la forma de la nariz. Un puente bajo puede acortar la nariz visualmente; un puente alto puede alargarla.
- Si tu puente es muy estrecho, busca monturas con un puente no demasiado ajustado para mayor comodidad.
- Comodidad y ajuste:
- Asegúrate de que las varillas y el puente se ajusten correctamente a tus orejas y a tu nariz.
- Un optometrista u oftalmólogo puede ayudar a adaptar la montura para que se asiente bien y no cause marcas o deslizamientos constantes.
- Tu estilo personal:
- Más allá de la forma de tu rostro, tus preferencias personales y tu identidad de estilo son fundamentales para que te sientas a gusto con tus gafas.
- A veces, romper las “reglas” puede resultar en un look atractivo y original.
Conclusión
Para elegir las gafas adecuadas según la forma de tu cara, lo ideal es buscar un equilibrio que contraste o complemente tus rasgos. Las pautas anteriores ofrecen un punto de partida sólido: rostros redondos con monturas angulares, rostros cuadrados con monturas redondeadas, etc. Sin embargo, estas sugerencias no son definitivas. Prueba diferentes estilos, colores y tamaños hasta dar con las gafas que resalten tu personalidad y hagan que te sientas cómodo/a y seguro/a.
Finalmente, no olvides que el factor decisivo siempre debe ser tu propia satisfacción al mirarte al espejo. ¡La mejor montura es aquella que te encanta y con la que te sientes realmente bien!
Deja una respuesta
Quizás te pueda interesar: